Por: Gabino Martínez Guzmán
Con mis felicitaciones para
el señor Ing. don Jorge Herrera Delgado,
por su dignidad y sentido de
decoro y circunspección.
El PAN se robó la Presidencia de la República. Quiere ganar en el Estado de Durango, quiere la Presidencia Municipal de la capital, varias presidencias municipales de importancia, la legislatura del Estado. O sea quiere todo, como si estuvieran compitiendo ellos solos. Para estos señores no cuenta el sacrificio de Aispuro, no cuenta el apoyo de la izquierda (más de 50 mil votos). Nada más falta que se les ocurra que la izquierda les dé una quinceañera.
Si gana la coalición las selecciones ¿quién está perdiendo el Estado de Durango? El PRI ¿Y quién lo está ganando? El PAN. Ni modo que se lo vayan a contabilizar al PT, o al PRD o a Convergencia. Si gana la coalición el Estado de Durango se convertirá en una base de apoyo para la candidatura del PAN a la Presidencia del 2012. Para la izquierda el apoyo será nominal, marginal.
Sorprende e indigna las declaraciones del abarrotero señor Alfredo Herrera Deras, quien afirma: que si Gonzalo Yáñez le dan la Presidencia de la capital, el PAN no votará por la coalición. La dirigencia estatal del PAN tiene que ponerle un bozal a este sujeto para que no derrumbe lo que se ha construido con mucho esmero, venciendo resistencias, recuerdos ofensivos y contradicciones dialécticas. Si continua con sus amenazas es claro que está siendo auspiciado por el PRI. Hecho que no sería insólito, recuerden que el PAN municipal apoyó a Ismael en el 2004 para que ganara la Presidencia Municipal; si lo dudan pregúntenle al Dr. Federico Karthe Escobedo, el candidato del PAN. Hecho que además lo tengo documentado.
Esta actitud del señor Alfredo Herrera me recuerda una anécdota que relató Blanco Moheno en su libro: “Un son que canta en el río”. Dice Moheno que en dos pueblos colindantes de Veracruz había una antigua rivalidad feroz y que hasta vidas había costado. “Pero quiso el destino, que el santo patrono de uno de los ranchos era una virgen y del otro un varón. Uno de los curas se le ocurrió una idea para terminar con esa vieja rivalidad; y la comentó con el curita del otro pueblo. Se trataba que la virgen y el santo se casaran. Los curas estuvieron de acuerdo, se corrió el rumor y luego la orden de su matrimonio. Se fijó la fecha y se organizó todo un festín en grande. Ambos pueblos estaban contentos, alborotados. La boda sería en un lugar donde colindaban ambos pueblos, ahí se iban a encontrar los novios y en ese lugar se celebraría la boda, oficiada por los dos curas y con la asistencia de toda la gente de las dos rancherías. Las personas andaban locas de alegría, se abrazaban viejos rivales, se tronaron cuetes y aquello era una algarabía”.
“Al finalizar la boda y ya unidos los contrayentes, el pueblo hizo fila para felicitar a los desposados, y darles un beso. Pero ya al final de una de las filas venía Nicanor, que era un borrachín del pueblo donde la virgen era la santa patrona. Llegó, se hincó ante la virgen, le besó la mano y se soltó llorando, y balbuceando expresó: “Virgencita mía, lo único que me puede es que te cases con éste joto hijo de la chingada”, aquella expresión fue como un detonante y se hizo una gran riña colectiva”.
Algo parecido está haciendo con sus amenazas y actitud el señor Alfredo Herrera Deras. Si su intención es reventar la coalición lo está haciendo muy bien, ojalá le paguen sus servicios como lo merece.
La izquierda no debe pagar porque se deje querer, pues entonces estarían jugando el rol de suripanta. Se supone que este pacto político no es una modalidad de una compra-venta, sino que se persiguen valores superiores a intereses bastardos. El PRD, Convergencia, el PT y Aispuro deben exigir que la Presidencia Municipal de la capital se la den a Gonzalo, de no ser así, es mejor que la izquierda rompa con la coalición. Si algunos de éstos están de acuerdo con el PAN, bueno, pues que ahí se queden porque de seguro ya les ofrecieron su curul, lo cual quiere decir, que los intereses de Durango les importa un pito.
La capital de Durango sería el único territorio que ganara la izquierda en caso de que triunfe la coalición. Marcos debe volver a ser lo que era, actuar con inteligencia y olvidarse de pasiones y revanchismos. Anteriormente, él mismo lo decía a cada momento, “la persona que en política actúa siguiendo los dictados de su corazón o del hígado, no es político”.
Incluso, si no le dan la Presidencia de la capital a Gonzalo, habría que explorar las posibilidades de ser candidato y no solo a la Presidencia, sino a la gubernatura. La resolución del tribunal electoral en que desconoce la dirigencia nacional, no hace lo mismo para la dirigencia local y ésta puede tomar una determinación como la que se comenta. De entrada, Gonzalo les estaría dividiendo la coalición. Y ese hecho para nada molestaría al PRI y al Gobernador.
Aispuro debe imponerse, de lo contrario, se lo van a comer; en estos vericuetos a donde lo llevó el destino, se va a encontrar con una gente con ciertas diferencias y usos diversos a los priistas.
Si este capricho es de todos la dirigencia del PAN, nos están demostrando que la lucha contra el caciquismo, el cambio y el bienestar de Durango es pura demagogia. Su interés concreto es quitarle un Estado al PRI. Por otra parte para la izquierda lo mismo le da que lo tenga el PAN o lo tenga el PRI, en el 2012 estarán otra vez con su guerra sucia en contra de la izquierda como lo hicieron en el 2006.
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