sábado, 12 de junio de 2010

EL PRI REVENTÓ EL DEBATE

Por: Gabino Martínez Guzmán

Venían a apabullar, fijaron el debate de un día para otro. Y pensaron que sería un día de campo. Pero les salió el tiro por la culata.

Quienes fijaron los temas fueron Jorge e Ismael y con bastante anticipación, de tal forma que cuando don Jorge se sintió preparado le ordenó al presidente del IEE de PC que realizara el debate, pero al grito de ya, para que la parte contraria no se preparara.

El debate se inició con el primer tema que era “Seguridad y Justicia”, se inició la primera ronda de cinco minutos que el moderador o el encargado del control del tiempo, lo acortaba para los contrarios y lo alargaba para Jorge y sus dos porros que lo acompañaban.

El debate comprendía tres temas y cada uno de ellos se expondría en tres rondas: exposición de temas, réplica o ampliación del tema y el tercero sería el de las conclusiones.

Nada más hubo tiempo para hablar del primer tema, pero salvo el suscrito, nadie respetó el temario, cada quien habló de lo que se le ocurrió. Como Jorge Herrera y Aispuro traen un pique personal, en lugar de hablar del tema se dedicaron a reclamarse como chirinolos. Al ver que nadie respetaba a nadie, ni las normas que ellos mismos habían establecido, yo también puse mi granito de arena y al ver Jorge que estaba bajo dos fuegos, reventó el debate y abandonó el estrado gritando como un combiliado. Las autoridades electorales en lugar de ordenar que el debate continuara con los demás temas y con los participantes que había, en forma inaudita dio por terminado el evento.

Este debate fue un fiasco. Las autoridades electorales no tienen idea del significado de un acto de esta naturaleza y los representantes del PRI ante el IEE son unos pobres burros y entre ambos crearon un ambiente ríspido.

Por otra parte, fue vergonzoso que Herrera Caldera iniciara el desorden, se viera como un porro y saliera huyendo como diablo al ver la cruz.

Este acto será una muestra de lo que será su gobierno, autoritario y de corte fascista.

ÁRBITRO PARCIAL E INCAPAZ

Por: Gabino Martínez Guzmán

El Instituto Estatal Electoral y Participación Ciudadana, demostró que es un árbitro parcial e incompetente. En forma arbitraria y absolutista fijó la mecánica del debate entre los candidatos a gobernadores y las conductas que debían observar tanto los participantes como el público asistente.

Determinó que no se permitiría la presencia de grupos partidistas 200 metros a la redonda del lugar donde se realizaría el evento, pero los primeros en violar esa determinación fue el PRI, quien se posesionó de la Plaza IV Centenario con grupos con garrotes en las manos. Prácticamente no se podía pasar al lugar donde se efectuaría el evento. Este hecho fue tolerado por las autoridades electorales pese a que sus disposiciones eran violadas abruptamente.

El presidente del comité es un cínico superlativo, puesto que afirma que los representantes de los partidos fijaron el debate, los temas, la mecánica y la fecha. Cuando todo ello es totalmente falso de toda falsedad, puesto que el IEE y PC y su patrón el PRI, fijaron todo lo relativo al debate, temas mecánica y fecha, todo ello en forma arbitraria. Al suscrito le notificaron la fecha 24 horas antes de su celebración, lo cual consideré un albazo o madruguete.

Al moderador lo sacaron de un bombín, y sucedió lo que tenía que suceder, que perdió el control del evento y aquello se convirtió en la torre de babel. No se respetaron los temas, cada quien hablaba de lo que se le ocurría, sin que tuviera relación en el tema a debatir. Al suscrito le recortó los tiempos y a Jorge se les alargaba y le querían permitir que hablara cuantas veces deseara.

Si el IEE y PC carece de capacidad para organizar un simple debate, ¿estará capacitado para realizar un proceso tan complejo como son las elecciones? El presidente de ese Instituto, no tiene carácter y se deja mangonear por los priistas como si fuera una marioneta, en estas condiciones no es un árbitro confiable para llevar a cabo las elecciones. Además trae los escrotos vacíos, pues no puede imponerse ni a un simple y humilde mozo.

El gobernador debe removerlo de inmediato, si desea llevar el carnaval en paz, de lo contrario, el mismo presidente va a crear los problemas, cuyo final es impredecible, pues estamos inmersos en un ambiente inflamable.