¿Durango es un pueblo emprendedor y trabajador o un pueblo de ladrones? Me hago esta pregunta por el corte de representantes políticos que hemos tenido a través de la historia cercana.
Por lo general predominan los ladrones, y pendejos y pareciera que el pueblo fuera igual que los representantes.
Por ejemplo en una comunidad de científicos se elegiría al mejor científico, para que representara esa comunidad. Escuchando y viendo la obra de ese científico, se da uno una idea de la calidad que pervive en esa pequeña sociedad.
Otro ejemplo; tengo cerca un costal que por lo obscuro no veo su contenido, meto la mano y cojo un puño de la semilla que contiene y resulta que es frijol, me acerco a una parte donde hay luz y veo que efectivamente es frijol pinto. Ese puñado es una representación del contenido de ese costal, ahí no hay ni frijol negro y mucho menos garbanzo o lentejas. Hay frijol pinto, quizá un grano más grande que otro y con alguna piedrita, pero el 99.99% es frijol pinto.
Nuestros gobernantes, son nuestros representantes, nuestros diputados locales, federales y senadores. Por ejemplo en México, la gente del D.F. y de otros Estados al platicar con nuestros diputados federales y senadores, se dan una idea del nivel educativo y cultural de Durango.
Si en el centro y en la república se dan cuenta que nuestro gobernador es una persona emprendedora, creativa, que sabe lo que quiere y el tiempo en que vive, de seguro exclaman, la mayoría de los duranguenses son gente emprendedora con inventiva. ¿Qué decimos de la gente de Monterrey?, que son personas emprendedoras y tacañas. Esto no quiere decir que todos lo sean, pero así son la gran mayoría.
Si el gobernador es medio pendejón, los que lo tratan, dirán que la mayoría de los duranguenses somos medio lerdos. Si nuestro gobernador es medio garañón, la gente de otros Estados que lo conozcan y lo traten van a pensar que la mayor de los duranguenses tenemos las mismas inclinaciones. Por el contrario si nuestro gobernador es medio maricón, pues la gente extraña a Durango van a creer que la mayoría de los duranguenses cojeamos de la misma pata.
Si las personas del D.F. o de la república se dan cuenta que para nuestro gobernador el dinero es la pasión de su vida, y que de gallina para arriba no deja nada que se le ponga cerca. Esas personas van a pensar que somos un pueblo de ladrones.
Como la mayoría de los gobernadores que ha tenido Durango durante el último siglo han salido millonarios del cargo, pues la gente de otros Estados piensa que los durangueños somos unos ladrones. (gobernadores honrados, los cuenta con los dedos de una mano y sobran dedos: Don Domingo Arrieta, Rodríguez Solórzano y párenle de contar).
Lo que la gente de fuera no se da cuenta es que nuestros dirigentes, gobernador, diputados y senadores no son representativos del pueblo de Durango. El pueblo en general no es como los gobernantes, no son una réplica, ni una muestra del pueblo de Durango. El mecanismo para obtener la muestra está truqueada. La mayoría del proceso de elección de la muestra está en manos de una pandilla de rufianes, por medio de la cual suplantan a los durangueños con gente y ladrona.
El pueblo de Durango no es como los gobernantes, este pueblo es emprendedor, creativo, orgulloso y valiente. Trae la indomable sangre tepehuana mesclada con la raza altiva y valiente de los iberos. Gente con dignidad y un alto sentido del honor. De esa cantera estamos hechos, no somos vendedores ambulantes ni asaltantes de caminos.
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